Para la gastritis. Tiene aceites esenciales que son geniales a la hora de combatir problemas tales como la gastritis. Es muy buena para la digestión en general.
Para los gases. A la hora de combatir el meteorismo, puedes tomarte un rico té de toronjil que calmará cualquier problema de gases que tengas.
Para el estrés. Además de las excelentes propiedades que tiene para la digestión, el toronjil es considerado un gran relajante. Y eso siempre es algo bueno para cuando estás estresado.
Para la hipertensión. Esas cualidades miorrelajantes que tiene el toronjil, ayudan también a que estés más sereno y que la hipertensión se acomode un poco gracias a su consumo.
Para la ansiedad. Así como ayuda contra el estrés, el toronjil sirve para el insomnio, la ansiedad y otros trastornos nerviosos.
Para el hígado. Su capacidad para beneficiar al sistema digestivo llega también hasta la zona hepática. Sin contar que además es antioxidante, algo que beneficia al hígado.
Para adelgazar. Es muy común que se emplee el té de toronjil para adelgazar. Es que, como habrás visto, puede llegar a ser bueno tanto por sus capacidades digestivas, tanto como por las ansiolíticas. Por eso, si vas a usar el toronjil cuyano para adelgazar, no dudes de probarlo en sus diferentes presentaciones.
Para la concentración. Asimismo, el toronjil tiene un leve efecto estimulante y favorece la concentración. No es de esas plantas que las tomas y son narcóticas, dando ganas de dormir, sino todo lo contrario. Se lo recomienda incluso para la memoria y el estudio.